Mediante comunicado de prensa No. 007, de fecha 23 de febrero de 2021, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (la CNBV) emitió una recomendación a las entidades emisoras de valores inscritos en el Registro Nacional de Valores y a otras entidades sujetas a la supervisión de dicha comisión, para que evalúen el impacto cualitativo y cuantitativo en su situación financiera ocasionado por la pandemia de COVID-19 y el mismo sea explicado detalladamente (desglosado de manera específica y acorde a las circunstancias de cada entidad) en las notas de los estados financieros básicos dictaminados (anuales) y de los estados financieros intermedios (no dictaminados), así como en el respectivo informe anual y en cualquier comunicado público que al efecto emitan dichas entidades.
Para tales efectos, se recomienda a los auditores externos de dichas entidades considerar dicho impacto en la elaboración de sus respectivos informes y opiniones que deberán presentar a la CNBV junto con los estados financieros básicos dictaminados (anuales). En el entendido que, en adición a los impactos en los resultados de la operación y situación financiera, también deberán considerar cualquier tendencia, compromiso, afectación a la liquidez y, en caso de que les resulte aplicable, el impacto de las facilidades regulatorias emitidas por la CNBV; además deberá revelarse cómo se está salvaguardando la capacidad de las referidas entidades para continuar como negocio en marcha y los riesgos al respecto.
Por otro lado, si al evaluar los impactos generados por el COVID-19, se determina que existe incertidumbre importante relativa a eventos o condiciones que pueden dar lugar a dudas significativas sobre su capacidad para continuar como un negocio en marcha, deberán revelarse dichas incertidumbres, así como los planes de acción tendientes a superarlas.